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La Consejera de Educación en la presentación del Máster Universitario en Formación del Profesorado
La Consejera de Educación en la presentación del Máster Universitario en Formación del Profesorado
FOTO. De izquierda a derecha: Decano de Formación del Profesorado, Celestino Rodríguez; Vicerrector de Gestión Académica, José Miguel Arias; Consejera de Educación, Lydia Espina; Directora general de Universidad, Cristina González.
La Consejera de Educación, Lydia Espina, ha asistido a la presentación del Máster Universitario en Formación del Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato y Formación Profesional. Si alguien me pidiese que resumiese con una única palabra el oficio del docente, diría que es un trabajo totalmente vocacional. Al menos, así lo vivo yo y así lo he observado en los compañeros y compañeras con los que he ido compartiendo aulas, reuniones y proyectos a lo largo de mi trayectoria profesional, ha explicado en su discurso.
No obstante, ha matizado que la vocación también requiere de profesionalidad. Es crucial que nuestro profesorado tenga una buena formación inicial y permanente, con contenidos de carácter técnico-pedagógico que le permita desarrollar su máxima competencia. La sociedad actual avanza a gran velocidad tanto en el terreno del conocimiento como en el de la tecnología. En este contexto tan cambiante, necesitamos profesionales bien formados, que puedan seguir aprendiendo a lo largo de su vida, que no queden rezagados y que sigan manteniendo viva la curiosidad por saber y mejorar.
La Consejera ha añadido que el profesorado tiene que planificar, programar, evaluar, innovar, personalizar. Y todas estas obligaciones deben estar asentadas sobre principios pedagógicos que contribuyen al desarrollo integral de nuestro alumnado. Así que este Máster Universitario en Formación del Profesorado de Educación Secundaria Obligatoria, Bachillerato Formación Profesional, cumple un papel fundamental.
También se ha dirigido al alumnado: Os estamos esperando. Nuestras aulas os necesitan. Formaros con rigor porque todo ese caudal de conocimiento os va a servir en el futuro para ayudar a construir una sociedad mejor que ayude a cientos de alumnos y alumnas a construir su propio proyecto de vida. No es un oficio sencillo. Tiene muchas complejidades. Pero os aseguro que es gratificante. Cuando un alumno o una alumna va cruzando pequeñas metas diarias o después de muchos años lo encuentras feliz en su profesión, comprendes de verdad el sentido del oficio docente.